Todo esto de la quiebra, aunque una salida legal, terminó por ocupar mi mente y tiempo de tal manera que mi cabeza no tenía espacio para nada más.
Hasta que me di cuenta de que hiciera lo que hiciera, este era un proceso que no dependía de mí y que “gastar” tiempo en ello no iba a generar cambio alguno en mis resultados actuales.
Había que reinventarse, pero ¿cómo?:
- Seguía haciendo branding, piezas publicitarias y lo básico del marketing digital (RRSS, páginas Web) sin intervenir en el resultado final de mis clientes, sin duda volvería a enfrentar al fantasma de la insolvencia.
- Cada día me costaba retener a mis clientes porque no entregaba resultados tangibles.
- La presión de salir a vender para pagar los sueldos de 18 empleados a fin de mes era cada vez más difícil y agotador.
- El trabajo creativo no es valorado a nivel de PYMES y por tanto no es bien remunerado.
Finalmente y como se dice, “el que busca siempre encuentra”, hoy mi situación está encaminada hacia un franco crecimiento y me preparo para escalar mi agencia digital. Te comparto algunas de las actividades que llevé a cabo para cambiar para siempre la forma en que veo el marketing.
- Conocí las estrategias de Funnel Marketing.
- Invertí en un programa de formación “de acompañamiento” a través de un mentor que me ayudó a conocer y desarrollar estrategias de Funnel Marketing.
- Escalé a mis actuales clientes ofreciéndoles un nuevo servicio con resultados sorprendentes, reales y tangibles.
- Vendí mis primeros embudos por un Set Up de US$1500 y un Fee mensual de US$500.
- Hoy me puedo dar el lujo de elegir a qué cliente tomar.
Todas estas experiencias me han dado aún más experiencia, pero lo más importante es que he aprendido que “invertir en conocimiento produce siempre los mejores beneficios».
10Manuel González, Marce Lita y 8 personas más1 comentarioMe gustaComentarCompartir